Y así, renegando de la vida, fui por primera vez a Crea+

Por: Joshua Briceño
Ex beneficiario del Colegio Fe y Alegría #34 y actual Creando

La primera vez que oí sobre Crea+, sinceramente, pensé que era algo muy aburrido. Inmediatamente me negué a la idea de asistir un día más a clases, e inclusive ni siquiera fui yo quien se inscribió, sino que mi mamá lo hizo por mí.

Así, renegando de la vida, fui por primera vez a Crea+. Al ingresar, me lleve una gran sorpresa: todos los “profes” eran jóvenes y se les veía muy pilas. Pero en fin… me dirigí a mi salón y fue recién ahí, cuando todo mi orgullo por parti cipar en “Crea”, nació.

Todo lo que estaba a punto de vivir iba a cambiar mi forma de ver las cosas. Desde el inicio, los profes me cayeron muy bien; eran amables y sobre todo alegres, cosa que no se ve muy a menudo en el colegio. Y así, las matemáti cas me comenzaron a gustar (aunque solo un poco)...

Asistiendo a Crea+, pasaron casi ocho meses y, de pronto, el año estaba a punto de  culminar. De inmediato pensé que mis sábados en “Crea” también terminarían, pero… la sorpresa de las sorpresas (la cual cambió mi vida) fue que uno de mis profes me invitó a ser parte de Crea+. En ese momento ¡sentí una alegría tremenda!, pero no la demostré, no sé por qué. Acepté inmediatamente y le dije a mi profe que estaba de acuerdo con la idea.

Pasaron dos meses hasta que asistí al evento de reclutamiento. Al salir de ahí, era obvio que estaba nervioso, porque no sabía si iba ser aceptado o no para ser un Creando. Después de esperar un tiempo, recibí el correo donde me anunciaban que había sido aceptado, ¡poco faltó para que saltara de la alegría! pero de nuevo no lo hice, no sé por qué.

Así es como comenzó una nueva etapa: mi vida como Creando. Debo admitir que el primer día fui aterrorizado, pero felizmente pude controlarlo a tiempo para poder dictar mi clase. Al comenzar estuve muy nervioso, ya que veía muchos rostros viéndome atentamente esperando que dijera “mi primera palabra”; en ese momento tomé una buena bocanada de aire y comencé a decir todo lo que sentía.

Al culminar ese primer día como Creando quedé, como diría mi estimadísima Dupla (con la que dicto el taller de Biología), “emocionalmente muerto”. De hecho que sentí unas ganas inmensas de abandonar todo, pero hubo algo que me llenó de satisfacción y eso era, por más insignificante que parezca, que me digan “profe”. El simple hecho de que me dijeran así me dio ganas suficientes para seguir. Crea+ se ha convertido en una parte fundamental de mi vida, ya que he conocido a mucha gente, he vivido muchas experiencias y sobre todo he conocido un ambiente fraternal que difícilmente se puede encontrar. No sé cómo agradecer todo lo que Crea+ me ha brindado y lo que me sigue brindando.

Sinceramente, deseo que Crea+ continúe con su apuesta por la educación y que siga creyendo que más niños puedan alcanzar sus sueños, así como lo estoy haciendo yo y lo seguiré haciendo. ¡Gracias Crea+!

El sueño de toda mi vida: enseñar

Por: Sebastian Abad
Creando / Taller de canto

Para mí, los milagros no existen. Existen algunas casualidades, existe la disposición de un grupo de gente, existe el compromiso y las ganas de que las cosas sucedan. Existe la ley de la atracción, la esperanza en un futuro diferente. Existe gente que da todo por cambiar las cosas, aunque sean pocas, porque saben que el cambio no se define por su magnitud ni por su impacto, sino por el simple hecho de comprobar, con acciones, que no todo está perdido.

Recuerdo bien mis primeras impresiones de Crea+: un amigo me estaba comentando el proyecto, mientras a mí me intrigaba cómo el sueño que yo había tenido toda mi vida, ya existía, y no sólo eso, sino que ahora estaba a mi alcance: enseñar.

Fui a la primera charla informativa de Crea+ con mucha expectativa y salí totalmente convencido de que éste era el proyecto perfecto para mí. Siguió la feria de talleres, el primer acercamiento a los niños. Recuerdo que preparé un par de temas, tenía todo más o menos (des)ordenado en mi cabeza y me sentía particularmente ansioso antes de acostarme la noche anterior. Resultado final: jamás me vi más convencido de lo que quería. No sólo los niños eran increíbles, sino todo el grupo humano de Crea+ era alucinante. Cada engranaje estaba perfectamente dispuesto a hacer todo para que las cosas sucedan. Era una cosa de locos.

Llegó el primer día de clases: la prueba de fuego. Recuerdo que se me ocurrían diversas situaciones en las que yo salía pésimamente derrotado delante de un auditorio rebelde. Tenía particular miedo porque había segmentado mi clase de canto a los alumnos más grandes de secundaria. De pronto, la fila que formaba mi clase se empezó a llenar, todos súper sonrientes, todos súper dispuestos y después de dos meses, puedo dar fe de que eso sigue ocurriendo cada sábado.

Trabajar con mis alumnos, lejos de ser extenuante, ha sido una de las experiencias más gratificantes de mi vida. Son personas con los sueños intactos, con las esperanzas y las ganas en perfecta sincronía. Pareciera entonces que existe una inconsecuencia entre la realidad que viven día a día y ese momento mágico que ocurre cada sábado. Es justamente ese el motor de Crea+: saber que quizás por dos horas, has llevado a los niños muy lejos, lejos sin retorno.

Recuerdo diversas anécdotas que me han marcado de manera especial. Una de las primeras clases, uno de  mis alumnos más tímidos cantaba un tema popular que había elegido para interpretar. De pronto, como es natural, los nervios le jugaron una mala pasada y se quedó en blanco. Me miró entre avergonzado y divertido. Dentro de mí, solo podía repetirme “espero que nadie se burle”. Los chicos no solo no se burlaron, sino que me dieron una clase maestra de compañerismo. Veía cómo varios de ellos trataban de soplarle la letra sin que yo me diera cuenta. Quedé tan impactado y emocionado que invité a todo el salón a pararse junto a él y a ayudarlo a cantar.

Se me viene a la mente otra situación especial con mucho cariño. Una de mis alumnas más participativas y entusiastas faltó cuando le tocaba interpretar una canción. A la semana siguiente, volvió a faltar. Quedé un poco decepcionado de mí, de mi calidad como motivador. Quizás no estaba haciendo lo suficiente. La siguiente semana la encontré muy temprano en la puerta del salón: “profe Sebas, discúlpeme por no haber venido… tenía que trabajar”, me dijo. No quise hacer preguntas. Me sentí acorralado. Le sonreí y le dije que me parecía genial que haya llegado tan temprano, tratando de fingir naturalidad. Siempre dicen que hay situaciones para las que es imposible prepararse y creo que aquella fue una de esas ocasiones.

Escribiendo estas líneas, he notado que ya no soy la misma persona, ya no pienso igual. Siento que de pronto, la satisfacción más grande que siento no es la evolución de los chicos, sino más bien todo lo que ellos me han enseñado. Ahora creo mucho más en los sueños, que sostenerse de una esperanza es la manera más natural y romántica de forjarse un destino y una meta. He aprendido a ver que más allá de las limitaciones que uno pueda tener por determinadas circunstancias, los sueños son imperturbables. Eso es Crea+, la esperanza hinchada de un grupazo de gente que siente que no todo está perdido y que va a hacer algo al respecto.

Un evento que grite: ¡Esto es Crea+!

Por: Kathy Cardozo
Subdirectora General de Crea+ Perú

No estoy muy segura todavía por qué acepte ser parte del comité organizador del evento de presentación de Crea+, que se daría el 09 de marzo. Sabía que sería una gran responsabilidad y que demandaría mucho sacrificio pero no le di muchas vueltas y dije que sí. De arranque nuestro comité jugaba con el tiempo en contra, algo que seguramente le pasa a muchos organizadores de eventos. El reto era realizar un evento que cumpliera con nuestros altos estándares de profesionalismo, sin dejar de ser creativo y que no demande mucho presupuesto. Nada sencillo.

Sin embargo, y esto es algo que no me deja de sorprender de Crea+, se formo un equipo de gente súper comprometido y muy creativo que supo sacar el evento adelante y hacer de él un verdadero éxito. Gente dispuesta a dar mucho más de lo que se le pide, apasionada porque las cosas salgan bien. Fue importante también para nosotros como comité, acercarnos a personas que tienen mucha más experiencia en campos similares, como son Álvaro Delgado Aparicio y Carla Pennano de APOYO Innovación. Gracias a sus ideas y consejos generamos un planteamiento del evento muy alineado a lo que queríamos: creativo, que invite a la participación y que grite: ¡Esto es Crea+!

Considero que cuando uno se involucra en este tipo de actividades, termina siempre aprendiendo: ya sea a organizar eventos, a dirigir grupos humanos o incluso a ser un buen anfitrión. Y se aprende más de las cosas que no salieron tan bien que de las cosas con las que quedamos contentos. El resultado del reto, que fue organizar este evento, la mayoría lo conoce. Estoy segura que las personas que asistieron se llevaron una muy buena impresión de nuestra organización, entendieron lo que hacemos y se sintieron conmovidas de alguna u otra forma. Mi deseo oculto es que se hayan ido del evento preguntándose de qué forma pueden poner su granito de arena para cambiar la realidad de la educación de nuestro país. Y que encuentren su respuesta en Crea+, ¡obvio!

Voy a agradecer una vez más a cada una de las personas que ayudaron en la organización del evento, así como a las que me ayudaron a respirar profundo y contar hasta cien antes que me estalle una vena. Sin nombres, cada uno sabe quién es y mis felicitaciones, todos representan ese agente de cambio que queremos en Crea+. Y para cerrar un consejo: si alguna vez les ofrecen hacerse responsables de una actividad de estas, ¡digan que sí!

Cambiemos la mirada, miremos Crea+

Por: Lorena Tulini
Coordinadora de Comunicación Audiovisual - Comunicaciones

Vivimos tan pendientes del futuro, tan preocupados de lo que va a pasar que nos olvidamos de disfrutar más las oportunidades que tenemos al frente, nos olvidamos muchas veces de lo afortunados que somos en tener la posibilidad de hacer un curso, comprarnos un nuevo aparato tecnológico, salir a cenar o irnos de viaje. Vivimos tan alejados de la realidad que nos rodea que siempre queremos más en lugar de disfrutar las cosas más simples, como una conversación con amigos, leer un libro, o un paseo por el parque. Vivimos tan superficialmente que siempre esperamos recibir antes que dar.

Para mí la educación es la base en el desarrollo personal de un individuo, ya que gracias a ella conoces la cultura, la ética, la moral, las historias, el arte, las ciencias, entre muchísimas otras cosas. Con ella se enriquecen y forman las personas.

Cuando me presentaron a Crea+, me encantó la idea de poder ayudar a niños sobre todo con el tema de la educación. Me pareció una buena oportunidad para empezar a dar lo poco o mucho que conozco, una oportunidad para conectarme con la realidad del lugar donde vivo.

Decidí enseñar inglés a niños entre los 9 y 11 años por que sentí que podía hacerlo, la experiencia de compartir con los niños cambió muchísimo mi forma de ver el proyecto, y lo más importante, mi forma de ver las cosas. No era sólo enseñarles una materia, era enseñarles de la vida; No eres un profesor, eres un ejemplo, y eso hace TODA la diferencia, por eso es tan increíble. Todo lo que les aconsejas, lo que les enseñas, la manera como los miras o como te diriges a ellos es totalmente percibido y aprehendido. Formas un vínculo como el de un hermano mayor, un buen hermano mayor.

Debo confesar que gran parte de mi curso de inglés lo dicte en español ya que me esforcé mucho en hablar sobre el RESPETO. El respeto que se deben dar ellos, el respeto que deben exigir de otros hacia ellos, el respeto que deben de tener para las personas, las cosas o los animales, el respeto en todo nivel, hablábamos sobre la tolerancia, sobre los vínculos familiares, dudas que tenían yo en lo que podía y sabia intentaba resolverlas, bueno y claro también aprendían inglés jajaja!

Luego de un año de estar en los salones, decidí dejarle la tarea de enseñar inglés a estos niños a otro Creando y tuve la suerte de formar parte del área de comunicaciones de Crea+ y encargarme de la parte audiovisual, que es lo que estudié.

Me encanta formar parte de Crea+, el grupo humano con el que comparto esta experiencia es tan rico y diverso que realmente me siento afortunada. Es difícil explicar la manera como me ENAMORÉ de Crea+. En realidad fue grabando a los niños, editando los videos, capturando el esfuerzo y el empeño con el que realizan las actividades, el cariño infinito que ofrecen, documentando las emociones que expresan, los rostros llenos de inquietudes y algo que decir.

Tener esa mirada es el reflejo del gran trabajo de Crea+ y me llena en lo personal y profesional: Poder crear una ventana para que los demás puedan ver el trabajo que realizamos los Creandos en conjunto y de esta manera incentivar a las personas a que se conecten a la realidad de estos niños y aporten en su mejoría.

Pasamos más de 1 hora al día frente al computador, por lo menos 2 horas en el tráfico y podríamos ofrecer esas horas a estos niños, en contribuir a la mejoría de la educación.

Conectémonos con la realidad de nuestro país, El Perú no es Miraflores, San Isidro, Surco, La Molina, Jesús María o Pueblo libre, la mayoría de los niños del Perú no estudian en el Carmelitas, en el Villa Maria, o en el Maria Reina. Observemos un poco más, disfrutemos más de las cosas simples, DEMOS SIEMPRE SIN ESPERAR RECIBIR.

Agradezco mucho a la vida por haber puesto en mi camino este proyecto y haber cambiado mi forma de ver las cosas.

PASIÓN, ESFUERZO, COMPROMISO X METOLOGÍA = ÉXITO

Por: Fátima Almeyda

Ser parte de Crea+ me permitió soñar de una manera inimaginable, soñar en el GRAN CAMBIO de la educación, soñar con niños triunfadores. También me trajo innumerables experiencias; desde la tierna sonrisa de un niño, el conocer amigos inseparables, creandos pidiendo consejos para su clase del sábado, hasta un pequeño niño con una conducta poco aceptable en el aula que tan sólo pedía a gritos un poco de cariño y comprensión…

Desde mi ingreso a Crea+ las personas que conocí y ahora GRANDES AMIGOS, buscábamos la manera de mejorar y hacer crecer Crea+, de diferenciarnos, de hacernos más profesionales, de mejorar las clases del sábado para que sean más productivas y efectivas, esto me llevó a ingresar al área de Pedagogía y Capacitaciones donde todos los integrantes eran tan soñadores como yo, pero con miras distintas, y como dice Luis Miguel, presidente ejecutivo de Crea+, en la diversidad de este grupo encontré la riqueza.

En el camino para el cambio se creó un comité para iniciar la metodología en Crea+, esa metodología por la que varias personas empezaron a trabajar arduamente, luego PEDAGOGÍA Y CAPACITACIONES hizo frente a este gran proyecto y se empezó el camino. No digo que fue fácil ni difícil, fue ENTREGA, PASIÓN, noches, días, fines de semanas enteras trabajando, días y días de capacitación, conversaciones y debates sin fin. Todo esto nos llevó a ver la manera de impartir todo nuestros conocimientos a los creandos, nos dimos cuenta que no se podría un día, por lo que decidimos un fin de semana largo. Capacitación que fue un verdadero logro gracias a la disponibilidad y compromiso de todos los creandos.

Estoy completamente orgullosa de formar parte de un equipo con gente tan emprendedora, que se esfuerza y trabaja tan arduamente como si esta área fuera tan similar o mejor que su puesto de trabajo. Miles de veces me he preguntado qué nos mueve a nosotros creandos a entregar tanto y tanto por personas que no conocemos, en este caso los niños, y mi única respuesta es que SOMOS DIFERENTES, que somos jóvenes que nos cansamos de esperar el CAMBIO, y que decidimos a empezar nosotros mismos EL CAMBIO.

Gracias Oscar, Andrea, Flor, Eduardo, Pel y Antonio, por creer en este cambio, por todas las reuniones compartidas como parte del área de Pedagogía y capacitaciones, por esta gran experiencia, por esta GRAN Y HERMOSA AMISTAD, gracias simplemente por ser Crea+. Sé que esta METODOLOGÍA acompañada de las GANAS, PASIÓN Y COMPROMISO, nos llevará al ÉXITO. Ánimos a todos los creandos, que juntos haremos el camino por y para los niños, serán días y meses intensos llenos de experiencias y riqueza personal. Sólo me queda recordarles nuestra frase, en Crea+ “Creamos porque Creemos”, añadiéndole también que en Crea+, nos capacitamos porque creemos.

A que vuelva, ¡no puedo esperar a que vuelva!

A que vuelva, ¡no puedo esperar a que vuelva!

Por: Pía Borges

He tenido la gran oportunidad de ser parte de Crea+ desde que se puso en práctica, en marzo de 2011, y tengo que admitir que desde ese primer día no he dejado de sorprenderme. Yo estaba encargada de enseñar taller de baile a niñas de primaria. Para comenzar, mi dupla y yo nos presentamos, diciendo que estudiábamos para ser doctora y psicóloga respectivamente. Cuando llegó el turno de las niñas, éstas iban diciendo mientras nos miraban fijamente con ternura, que de grandes querían ser doctoras o psicólogas, como nosotras. Queda poco por decir respecto a la emoción que sentimos en ese momento mi dupla y yo.

Pasaron las semanas y cada vez que Mariana – mi dupla- o yo llegábamos al salón, éramos recibidas con una súper ola de abrazos y besos por la que no nos deteníamos a protestar. Finalmente llegó el día de nuestra presentación. Les dijimos a las niñas que bailen como lo habían venido haciendo, muy bien por cierto, pero que ante todo se diviertan, porque estaban ahí para que juntas cumplamos sus sueños. El orgullo que sentí tras verlas desenvolverse ante el público no podría describirlo con palabras, y es que tanto Mariana como yo no nos imaginamos el éxito que tendría el esfuerzo de nuestras niñas, en especial reflejado en los rostros de sus familiares y de ellas mismas. Cuando volvimos al salón y comenzamos a ordenarlo, iban acercándose una a una las niñas a despedirse y decirnos que esperaban vernos el próximo semestre. Incluso decían que no podían esperar a que acabaran las vacaciones y volver al colegio, porque los sábados volverían a tener Crea+. No sospechaban que ese sentimiento era mutuo. La última niña en acercarse a despedirse fue J, junto con su mamá. La señora no se cansó de mostrar una inmensa gratitud ante lo que le habíamos enseñado a su hija, diciendo que lo que más le apasionaba era bailar y siempre la encontraban repitiendo pasos de baile por los rincones de su casa.

Nos dijo que creía que el colegio había sido bendecido este año por nuestra presencia y que esperaba vernos pronto, porque eso que hacíamos –fomentar el renacimiento de sus sueños- era lo que los niños necesitaban. Las palabras de esa mamá causaron en Mariana y en mí una fuerte impresión que nos impulsó a volver con más ganas que antes el segundo semestre, y estoy segura que nuestros ánimos han mejorado desde entonces, y es que la experiencia vivida cada semestre es, verdaderamente, cimiento de nuevos propósitos.

“La realidad no es lo que ocurre, sino lo que hacemos con lo que ocurre”.

Nombre: Victoria Medrano Blanco
Edad : 24
Ocupación: Administradora
En Crea+: Gestión de Colegios

Crea+ me permitió salir de mi “burbuja”. Escuchar niños de primaria disculpándose por haber faltado a las clases de los sábados porque tenían que trabajar para ayudar en su casa, no es algo que pasa normalmente en mi “entorno”. Recuerdo que una de mis niñas de 1er grado (5 añitos) me preguntó: “¿srta, usted trabaja?” Yo le dije que sí, entonces algo confundida me dijo: “Ahh entonces usted no ha estudiado” Cuando le conté que ya había terminado mi carrera en la universidad, y estaba trabajando en una empresa, se sorprendió, y me dijo: “Cuando yo sea grande quiero ser igualita a usted, siempre la llevaré en mi corazón”. En ese momento la abracé, le dije que yo también, que se tenía que esforzar y sacar buenas notas y solo me repetía a mi misma: No llores Vicky, no llores….

Todo comenzó cuando en el último semestre de mi carrera convocaron a una de mis amigas para formar parte de un proyecto social enfocado en la educación, llamado Crea+. Desde entonces comencé a formar parte del área de Gestión de colegios, pero no imaginé lo que iba a experimentar el siguiente año.

Al principio no creía que iba a tener una cercana relación con los niños, pero después de mi experiencia sábado a sábado he conocido a muchos de ellos, los considero mis “sobrinos”. En esta época de vacaciones los extraño muchísimo, es muy raro levantarte un sábado y pensar ¿y ahora qué hago si no hay clases?.

No puedo concebir un sábado sin tener a mis niños, sin esperar que al finalizar del día corran a contarme que les encanto su taller, que me muestren sus buenas notas o trabajos, y algunos me digan: Srta. hice esto para usted!. O simplemente estar ahí para escucharlos, apoyarlos y aconsejarlos si puedo, pues ellos también comparten sus problemas familiares o del aula con nosotros, buscando consuelo y apoyo.

Recuerdo que una de mis niñas de tercer grado, algo tímida e introvertida, no quería entrar a su taller porque no se quería despegar de su hermano mayor, conversé con ella, y llorando me dijo que era porque en su salón había un chiquito que la molestaba siempre y ella no sabía qué hacer, le explique que ella no podía permitir que nadie le falte el respeto o la fastidie y si lo volvía a hacer que me lo diga. Ingresó a su taller con bastante esfuerzo pero al finalizar su clase la sonrisa que tenía en la carita sosteniendo la manualidad que había hecho valió TODO, desde ese día la veo sonreír siempre, participa más en clase, menos tímida y segura; ser parte de ese proceso fue una gran experiencia y enorme satisfacción para mí.


Y es que he llegado a adorarlos, no saben como me parten en pedacitos el corazón cuando me dicen: Por favor profesora no se vaya queremos que se quede aquí de lunes a sábado, cuando corren a saludarte, te abrazan, te agarran de la mano y caminan contigo en la hora de salida o refrigerio. Nunca me imaginé que podría ser parte del proceso de formación de otras personas, verlos aprender, crecer, madurar, sonreír por momentos que a veces las personas damos por sentado.

Debo confesarlo, mi experiencia en Crea+ me ha traído muchísima felicidad en mi vida, considero que me ha hecho crecer como persona, he logrado aprender tanto de los niños como también de los creandos, jóvenes que aunque trabajan o estudian dedican la mañana de los sábados a los niños, por no decir parte de su semana completa, quienes se han convertido en grandes amigos míos. Creo que todas aquellas personas que han asistido aunque sea 1 sábado a Crea+ comparten este sentimiento, y los que todavía no, los invito, porque es una experiencia muy enriquecedora ser parte de un grupo de jóvenes que buscamos ayudar en la educación de los niños de nuestro país, formándolos en valores, ayudándolos a alcanzar sus sueños, abriendo sus horizontes a más posibilidades, creando más sonrisas.

Hace un tiempo leí un frase que engloba todo el trabajo de CREA+ “La realidad no es lo que ocurre, sino lo que hacemos con lo que ocurre”. Sabemos que hay pobreza en nuestro país, índices muy bajos en educación, corrupción por la falta de valores, peligro en las calles (pandillas, delincuencia, etc.)…pero ¿Qué realidad estamos creando? …..Considero después de esta enriquecedora experiencia que con voluntad, esfuerzo y trabajo en equipo podríamos alcanzar nuevas “realidades” para nuestros niños.…CREAMOS PORQUE CREEMOS.